Entrenamientos de (no)confianza

En su último post, Roberto Palomar , habla sobre los entrenos de confianza que hizo antes de preparar Lanzarote y de los que está haciendo ahora de cara a la Titan.

Como ya os comenté, en mi caso, el sábado tenía planeada una salida con la gente del gimnasio para hacer  el recorrido de la half de Calella. El que tenía que ser mi entreno de confianza se convirtió en todo lo contrario. Nada más levantarme ya noté que la cosa no iba bien, ya que me fue imposible desayunar, pero como tenía una buena salida en bici, me forcé a comer algo en el coche de camino a la salida. Una vez allí todo el mundo iba con manga corta y yo con jersey y mucho frío, también mala señal.

Al comenzar a rodar tampoco iba mal del todo, a mitad del grupo sin tener que hacer grandes esfuerzos para seguirles (hay que matizar bien que los de adelante no estaban apretando) los primeros km de Collsacreu, ya con el grupo intermedio bien, pero poco a poco me fui encontrando mal y los perdí hasta que el último grupito me atrapó y me acabó adelantando. Llevaba 20km y me quedaban 2 para llegar a la cima. Con mucho frío y arcadas conseguí llegar a Collsacreu, dónde fue dejar la bici y digamos que pasar al siguiente nivel después de las arcadas. Se acabó el entreno para mi. Suerte que el gimnasio disponía de una furgoneta dónde pude hacer el resto del recorrido (con mucho frío y dolor de cabeza). Al final el que conducía me agradeció la compañía e incluso a un amigo le fue bien mi pájara, porque se le estropeó el cambio y pudo coger mi bici.

Al acabar la ruta me fui para casa, dormí 3h y me levanté más o menos bien de la barriga pero aún con dolor de cabeza. La calçotada de cumpleaños que tenía el domingo se convirtió en una pan tostado con pollo a la brasa. Resumiendo, que el último entreno para coger confianza de cara a Terres del Ebre no fue bien, aunque ayer cogí la btt e hice 2h a buen ritmo y sin encontrarme muy mal.

Borja C.